Inyectables



Si detectara
el gen poético
el código ético de barras

inocularía
etiquetaría

el pálpito, el respirar de la herida

inyectaría

la debilidad y la fortaleza de lo inestable
el líquido de la duda.

La aguja del orden desparramada por la aorta,

morder el polvo.

Rompería

rasgaría con bisturí
sus bolsillos repletos.

Dinamitaría

los ceros de sus cuentas corrientes
los puntos estrella de sus tarjetas vips.

Los invitaría

a comer caliente
diariamente
solos
en los comedores sociales.

Si detectara
el código ético de barras

callaría                        a
transmutaría              a

quienes recorren el mundo
por una supuesta paz global
por el brillo de una oscura economía.

Si inyectara
el gen poético
los gallos cantarían rock sinfónico
la paz 
la riqueza
serían más que palabras

rotas

por el mal uso.

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