Caperucita no vuelve a la oficina

- Qué no, qué no y qué no!! Yo me quedo en el campo, aunque llueva.

- Caperucita hija, que tu jefe te espera que tienes que libar el polen
para hacer la miel, y además hay que preparar una torta y un pastel,
que si no nos quedamos sin cuento.

- Déjate de cuentos abuela, que yo me quedo con Feroz y las gafas puestas, que nos vamos a Creta a cambiar esta historia. Por cierto, aquí te dejo el teléfono de las Empanadas Argentinas de Sor Angela de la Cruz, que ahora ya todo se externaliza, que de tanto ir y venir, algo he aprendido. Cuídate abuela.

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